PLAN
CONDOR
La Operación Cóndor o Plan
Cóndor es el nombre con que se conoce el plan de coordinación de
operaciones entre las cúpulas de los regímenes
dictatoriales del Cono Sur de América —Chile, Argentina,
Brasil,
Paraguay,
Uruguay,
Bolivia
y esporádicamente, Perú,
Colombia,
Venezuela,
Ecuador—1
con la CIA de los Estados
Unidos,2
llevada a cabo en las décadas de 1970 y 1980.
Esta coordinación se tradujo en
"el seguimiento, vigilancia, detención,
interrogatorios con tortura, traslados entre países y desaparición o muerte de personas
consideradas por dichos regímenes como 'subversivas
del orden instaurado o contrarias al pensamiento político o ideológico opuesto,
o no compatible con las dictaduras militares de la región'".2
El Plan Cóndor se constituyó en una organización clandestina internacional para
la práctica del terrorismo de Estado que instrumentó el asesinato
y desaparición de decenas de miles de opositores a las mencionadas dictaduras,
la mayoría de ellos pertenecientes a movimientos de la izquierda política.
Plan Cóndor es el nombre que se le dio al plan de inteligencia
coordinado entre la CIA y las dictaduras militares que se encontraban en
ciertos países de Latinoamérica (Chile, Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y
Bolivia). Todo esto se creo para eliminar a los movimientos de izquierda de
estos países e intentar evitar otra posible revolución como la cubana, y de
esta forma (por medio del miedo y la violencia) condenar a estos países a estar
bajo el régimen capitalista el cual defendía EEUU y evitar q más países se
aliaran al bloque soviético.
La represión convirtió a los gobernantes implicados en ejecutores del “terrorismo de estado”, que dejo un saldo de más de 400.000 muertos o “desaparecidos”.
En 1990 se encontraron en Paraguay unos papeles secretos que revelaban todos los actos cometidos por la policía política de ese país; dentro de esos papeles se habla de una reunión celebrada en Santiago de Chile a fines de 1975, coordinando acciones de represión entre todos los países de la región.
En el informe elaborado por el agente del FBI Robert Scherrer, de 1976 (integrante de la embajada estadounidense en la capital argentina, desde 1972) al director del FBI en Norteamérica, se hablaba de la existencia de este Plan Cóndor, con el fin de eliminar a enemigos políticos. En esta carta se nombraba a Chile como el centro líder del plan.
En un documento de la CIA con fecha del 23 de junio de 1976, se deja en claro que hubo una reunión en Buenos Aires a comienzos de 1974 donde se reunieren oficiales de Chile, Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia para ponerse de acuerdo con las acciones de represión.
Éste Plan Cóndor fue uno de los tantos movimientos anti comunistas que existió en el mundo, la gran mayoría de estos dirigido por la CIA para derrocar a los comunistas e imponer a toda costa el capitalismo.
La represión convirtió a los gobernantes implicados en ejecutores del “terrorismo de estado”, que dejo un saldo de más de 400.000 muertos o “desaparecidos”.
En 1990 se encontraron en Paraguay unos papeles secretos que revelaban todos los actos cometidos por la policía política de ese país; dentro de esos papeles se habla de una reunión celebrada en Santiago de Chile a fines de 1975, coordinando acciones de represión entre todos los países de la región.
En el informe elaborado por el agente del FBI Robert Scherrer, de 1976 (integrante de la embajada estadounidense en la capital argentina, desde 1972) al director del FBI en Norteamérica, se hablaba de la existencia de este Plan Cóndor, con el fin de eliminar a enemigos políticos. En esta carta se nombraba a Chile como el centro líder del plan.
En un documento de la CIA con fecha del 23 de junio de 1976, se deja en claro que hubo una reunión en Buenos Aires a comienzos de 1974 donde se reunieren oficiales de Chile, Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia para ponerse de acuerdo con las acciones de represión.
Éste Plan Cóndor fue uno de los tantos movimientos anti comunistas que existió en el mundo, la gran mayoría de estos dirigido por la CIA para derrocar a los comunistas e imponer a toda costa el capitalismo.